Las serpientes han sido fascinantes, misteriosas y en ocasiones temibles por las personas. Se cree que están relacionadas con los reptiles acuáticos y que con el transcurso de los años, y a través de la evolución han cambiado. Las encontramos de todos los tamaños, colores y en varios entornos. Existen más de 3.000 especies de serpientes, y sólo 375 poseen veneno. A continuación te presentamos cinco de ellas.
Serpiente Marrón Oriental
Esta serpiente puede tener hasta un 1 / 14, 000 de una onza de su veneno, lo bastante para matar a un hombre. Esta serpiente habita en Australia. Se caracteriza por moverse a gran velocidad y ser agresiva al punto que hasta persigue a las víctimas. Son tan venenosas que hasta una recién nacida puede matar a un humano, ya que contiene neurotóxicas y coagulantes.
Serpiente Taipan interior
Su veneno es uno de los más tóxicos del planeta. Con una mordida, se calcula que puede matar hasta 100 hombres, ya que al morder inyecta aproximadamente 110 mg de veneno, tan letal que podría matar hasta 250.000 ratones al instante. Se considera que es, incluso más venenosa que la cobra o cascabel. Se caracterizan por no ser agresivas y no ser muy vistas alrededor de los humanos.
Mamba Negra
Ella se encuentra, especialmente, en África. Se caracteriza por ser agresiva y tener una precisión tenaz. Otra cualidad es su gran velocidad. Puede alcanzar una velocidad de hasta 20 km / h. Una mordedura de esta serpiente puede matar entre 10 a 12 personas. Si te muerde, al principio sentirás un hormigueo en la zona, visión doble, fiebre, alucinaciones y ataxia. La muerte no se da al instante, pero es necesario la atención médica rápida.
Serpiente Taipan
Se localiza en India. Su veneno es letal, que podría matar hasta 12.000 conejos al instante. Su veneno se caracteriza por coagular la sangre, obstruyendo las arterias.
Serpiente Krait Azul
Se considera la más mortal de las serpientes. Habitan en Asia, especialmente, en indonesia. En muchos casos, el antídoto no es suficiente. Se caracterizan por ser agresivas y recorrer por las noches.
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